Pienso en vos y me acuerdo del personaje de Capusotto.
And yet.
Ayer, a punto de salir de casa para zazen (hoy Alberto te escribe también), escuché en la radio que hablaban de vos y solo podían hacerlo por un motivo. Te busqué en Wikipedia, pero ahí decía que todavía estabas vivo: era muy reciente la noticia. En la radio, lloraban (momento "verdad"), así que guglié mejor y saltó. ¡Zas! Otro que se va antes de tiempo por esta reventada enfermedad. Mientras me lavaba los dientes de raje, miré el dibujito de mi papá que tengo en el pasillito hacia el baño. Me entristecí rápido, pensando en todos los que iban a llorarte.
Sos grosso, no doubt. Para todos los que te lloran y agradecida por este tema hermoso, vaya mi sencillo homenaje, Luis Alberto:
"... los seis agazapados en torno al sabroso volátil. Como siempre, yo abrí el banquete comiéndome la rabadilla. La ceremonia umu takapu empezaba a serme harto familiar, pero nunca me resultó tan alegre como aquella noche."
Aku-Aku: el secreto de la Isla de Pascua, de Thor Heyerdahl, traducción de Antonio Ribera, Barcelona: Juventud, 1959.